De idas.

Todo queda en sensación,

como chispas de un relámpago

que enciende en las retinas.

Una estampilla pegada en un sobre

que se dobla frente al vapor.

Quiero quererte,

pero no me sale.

No será otro adiós

en cámara lenta. 

Flor que piensa

Lo que está quieto

es el reflejo

de mi propia quietud

Flojos pensamientos

que enraízan en el aire

sin paciencia

En la ruta

Ríos que esconden su agua

Migas de pan tostado

imitando la arena

Una vela encendida

cubierta de hielo

parasitando en lo frio

de nuestra historia

Pueblos y gentes

de calle asfaltada

haciendo cola para pagar sus días

Y yo los atravieso,

como la cruz de una iglesia

Otro puente sin orilla.