Conocí

Tuve un pueblo

entre mis manos

agité las aguas del río

Me escondí en el monte

talé sus huellas

sin consecuencias

Ahí estuve

Planté semilla

regué su espalda

pagué sus noches

Bailé sin ganas

pesqué

en la orilla

até sus ramas

Hundí en la arena

mis propias escamas.

Mis

De las tardes y los amigos

de las rocas, los espinos

los llamados y destinos

tarareando

Sintiendo como Vietnam

tus besos como bombas

de tu boca

pequeña langosta del estero amarillo

De esas veces donde me arrodillo

de lo bello de tus formas

saltando entre mis ojos

los aromas que rebrotan

entre kanikamas y hojas verdes

Te aderezo.

Mi ilusión.

Grilla

Cuatro hilos mueven al mundo

o cuatrocientos

fuerte lo sujetan

hasta enrollarse

como lanas

trama de una bufanda

que abriga

esconde las marcas

de besos y dientes

restos arqueológicos

de quienes buscamos ser