miércoles, 14 de noviembre de 2007

El valor de los dias













Todos sabemos algo sobre el tiempo. Es uno de esos saberes que no se enseña, que no se discute, porque todos podemos experimentar.
Es omnipresente, es parte de la materia de lo que todo esta hecho. Agua, tierra, sol. Tiempo.
Podemos ver el paso de los dias en las caras de quienes nos rodean, de aquellos que se animan a mirarse en el espejo, aunque es mas facil comprender dicha actividad en aquello que recien se involucra con el tiempo. Mirar fijo el reloj mientras pasan los segundos, u observar una flor que germina y crece es casi lo mismo. Y me refiero a la situacion de proceso y modificacion. El tiempo -o nuestra nociòn del mismo- nos visita para transformarnos, seamos o no concientes de ello. Mirar, intentar ver mas alla de nuestros ojos, regalarnos un poco de piedad sobre nuestras precisiones es algo que hace bien. Ese stop, parar un segundo y callar la mente frente a otro individuo nos deja -hablo de mi- ver al otro individuo un poco mas parecido a lo que podria ser. El otro no es quien esta siendo, sino su potencial y es a quien tenemos enfrente, si lo dejamos fluir en el tiempo. Quiero cerrar, porque este dialogo es continuo, por mas que no este escrito ya mas a partir de la proxima pa.. la.. bra...

1 comentario:

Unknown dijo...

"No siento nada mas que la ausencia de tus ojos en los mios...
No hay espejo que deje nuestro deseo sin reflejo..."
Tiene que estar...